Nena, llevo mucho tiempo dándole vueltas al mocho...
Haciendo eses cual estúpido birlocho medio pocho...
Hoy quiero contarte mi secreto, mi teorema del ocho
Ya lo sabes, yo soy el ÑANGO de veintiocho
El calavera que baila la rumba del calimocho
El flaco de la estampita y el TOCOMOCHO,
Vendiendo INCUNABLES del siglo dieciocho
Soy un santo varón, un apátrida sin alas, un alforrocho
Un bruto, un jarocho morocho más lúcido que chocho
Un jodido siervo de la GLEBA que todo lo escamocho
Sí, niña, hoy por fin cumplo los veintiocho,
Y te dedico esta rima, mi teorema del ocho
MESANDO dubitante mi barba de gocho,
Pensando en tus dulces labios de bizcocho
Y sí, quizá el número que te encandila es el sesentaiocho
Mas... súmale uno y haz que mi verso no acabe en ocho...
¡Verás flaca como yo por ti toda la santa noche trasnocho!
Por cierto... alguien sabe ¿Qué es un Mei Tai? ;-)
Por cierto... alguien sabe ¿Qué es un Mei Tai? ;-)
1 comentario:
Respiro de tu inspiración. Hombre de la bolsa, cuánto pesan las palabras?
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